7 ago 2009

Una semana para el olvido

"Hoy es viernes, joda, joda, joda" ustedes dirán. Pero no es mi caso.
Hoy es viernes, y desde el martes estoy en cama porque me sacaron de urgencia la muela del juicio, lo cuál no pareció ser tan grave el miércoles cuando me agarré un muy homosexual resfrío vaya uno a saber cómo y dónde (y por qué carajo!).

El miércoles debería haber entregado un trabajo en la facu al que le tenía que hacer unos ajustes; pero, me agaché, tomé posición fetal y me garqué en Informática III y en sus INÚTILES... ¿docentes? Bueno, en esos.

El jueves repuntó ya que me pude levantar de la cama y pensé: "Listo, para el sábado ya estoy joya", pero no! Hoy siendo viernes mi nariz sigue llorando moco cual canilla a la que hay que ajustarle el cuerito.

Cabe destacar que estoy cagada de hambre pero que debido a mi frígida muela, perdón, al frígido hueco que me dejó la muela, sólo puedo masticar de un lado sólo, ¿y adivinen puntualmente qué? Papilla. Muy triste.

A pesar de que todo esto me pasó en 1 sola semana, parece que el destino, así tan puto y revirado como él se hace, me quiso seguir paseando en pelotas por un campo lleno de ortigas; y así es cómo, desde el jueves pasado no laburo más (y espero que sobre decir que no por decisión propia).
Y he ahí la receta para tener una semana del orto.

Me gustaría decir que mañana ahogo estos 8 días en un coma alcohólico, pero sé que lo más probable es que si llegara a oler siquiera una gasa con alcohol dentro de esta semana, mi hígado saldría expedido por alguna de mis cavidades montado a caballo, con un sable en la mano y al grito de "VIENEN LOS INGLESES!!!", seguido del intestino delgado en su longitud toda.

Y ahora los dejo porque para variar, el líquido que retiene mi vejiga está clamando libertad.














Así te deja la semana, con los óvulos en la garganta.



Será hasta la próxima.
Su fiel servidora, L.


Nota agregada 20.57 hs:
Y claro, cuando me fuí a mear, sonó el teléfono.
De más está decir que no llegué a atender.

Nota agregada 21.13 hs:
Me fui a hacer unas tostaditas con Tholem mientras espero la comida.
Las pongo en un platito para traermelas a mi pieza y qué pasa? Se cae 1 a la mesada, claro está, del lado del Tholem.
Ya fué, que lo limpie el gato.

1 comentario:

  1. JAJAJA como me cague de risa! mujer! a veces suceden esas semanas en las que todo va para atras... no pegas una! encima tus defensas bajan y caes en la rotunda convalecencia... Debil impotente de no poder revertir la situacion...Tan solo resta esperar... y volver a la normalidad! cuidate! asi podes volver a hacer todo lo que mas te gusta hacer...

    Besotes!

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